La micropigmentación facial es una especialidad estética cuyo fin es equilibrar y armonizar los rasgos faciales de manera semipermanente, obteniendo resultados naturales de forma inmediata .
La evolución y perfeccionamiento de esta técnica ha mejorado:
La apariencia estética de las cejas, corrigiendo y recuperando su forma o haciéndolas más espesas.
Los labios, realzándolos para conseguir un aumento óptico del volumen y corrigiendo asimetrías
La línea de los ojos, intensificando la mirada variando su tamaño y forma, así como un relleno de pestañas.
Su utilidad, está dirigida:
A personas que necesiten maquillajes que no se alteren con hábitos o prácticas deportivas como la natación.
Ahorro de tiempo diario en maquillaje
Corregir posibles malformaciones de labios, cejas y ojos
Es una técnica suave con una duración del tratamiento de unas dos horas que incluye el diseño y la realización del mismo y sus resultados se mantienen aproximadamente entre 1 y 3 años, según zona a tratar, tipo de piel del paciente y tono elegido, y consiste en la implantación de pigmentos de un solo uso bajo la piel.
Como el grosor de las distintas capas de piel es muy irregular, suele ser necesario un retoque al cabo de un mes o mes y medio según zona.
Hoy en día, las máquinas que utilizamos no tienen apenas vibración, y esto sumado a que no profundizamos, evita cualquier tipo de sangrado en la piel.
Así mismo, la sesión de tratamiento debe de ir acompañada de un consentimiento informado en el que quede constancia de los datos del cliente, del micropigmentador y de los productos que se utilicen en la sesión de tratamiento.